TECNOHUMAN@.


Blog de Tendencias21 sobre las implicaciones sociales del avance científico, tecnológico y biomédico.


Búsqueda

Tendencias21 ha mostrado en numerosas ocasiones los últimos avances tecnocientíficos. Ahora bien, recientemente he conocido un avance que me ha dejado estupefacto: la iontrónica.


Ión Hidrógeno: Imagen obtenida de Wikipedia
Ión Hidrógeno: Imagen obtenida de Wikipedia
Habíamos visto que es posible cambiar órganos, implantar artefactos, modificar los genes, las proteinas, etc. Paulatinamente estos avances se han ido haciendo cada vez más micro y parece ser, según nos muestra Anabel Paramá, que el estudio de los iones y el conocimiento de su transferencia por dentro de nuestro organismo abre la era de la iontrónica.

Honggu Chun y Taek Dong Chung han realizado un amplio trabajo de revisión sobre este interesante avance en la prestigiosa revista Annual Review of Analytical Chemistry. De hecho, Japón es la región que está abanderando este tipo de conocimiento.

La idea es relativamente sencilla, controlar el flujo de iones para, así, poder controlar diversos procesos orgánicos. Incluso el dolor. Pero las aplicaciones van mucho más allá: superconductores, nuevos tipos de metales, etc.

Lo que a mí me ha dejado muy sorprendido es el paso que se ha dado hacia una creciente ciborgización humana. Gracias al conocimiento del flujo de iones y a su control será mucho más sencillo reducir nuestro dolor e, incluso, hacer que un artefacto biomecánico sienta dolor.
Martes, 30 de Junio 2015
Nota

BITÁCORA

Mañana 17 de junio tengo la suerte de compartir debate con un grupo de investigadores sobre el espíritu crítico de gran talla.


La democratización de las sociedades, la promoción de la autonomía, el descubrimiento y desarrollo de la vocación del sujeto, la ruptura con la tiranía acrítica e ideológica, el fomento del pensamiento crítico y creativo, la comprensión profunda del otro y del auténtico diálogo entre los sujetos, la resemantización crítica de la realidad, la quiebra de hegemonía basada en un sistema de privilegios históricos y la promoción de un esquema meritocrático son razones suficientes para incentivar la horizontalidad y la participación dentro del aula inherente a la pedagogía crítica.

La cuestión está ahora en saber cuáles son las bases antropológicas y ontológicas de una propuesta socio-educativa de tipo crítico-relacional. Como resulta evidente a cualquier planteamiento pedagógico subyace una concepción antropológica y ontológica de la persona. De ahí que los imaginarios sociales que basan el conocimiento de nosotros mismos condicionan los procesos institucionalizados de desarrollo personal . Para ello, lo primero es partir –como la expusimos antes– de una concepción relacional del ser humano.
Martes, 16 de Junio 2015
Nota

BITÁCORA