Es un hecho que el mundo está inmerso en un cambio climático provocado por el calentamiento del planeta como consecuencia de las emisiones de gases de efecto invernadero, generados por la actividad humana, que ponen en riesgo la sostenibilidad de un modelo de sociedad basado en el consumo. Si las pautas actuales del cambio climático se mantienen, los resultados pueden resultar catastróficos para nuestro planeta.
La electrónica, tecnologías de la información y las comunicaciones, ETIC, que representan en la UE más del 6% del PIB y contribuyen al 20% del suministro mundial de estas tecnologías, son también parte del problema ya que son responsables del 2% de las emisiones de CO2 en el mundo. Pero a su vez contribuyen eficazmente a limitar los efectos del 98% restante, mediante el aporte de una amplia gama de soluciones tecnológicas que permiten mejorar de la eficiencia de otros procesos relacionados con otras actividades industriales, sobre todo en una economía, como la europea, de fuerte dependencia de una energía fósil que no se produce, está muy poco diversificada y no dispone de una clara estrategia respecto a las energías renovables.
Este sector tecnológico europeo puede contribuir así, a reducir el impacto medioambiental del conjunto de los sectores económicos y ha sido el centro de atención del primer Foro TIC y Sostenibilidad organizado conjuntamente por AETIC y la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía el pasado mes de junio en Sevilla. El debate se centró en la eficiencia energética, pero también en la movilidad y el transporte, en la gestión del agua y en el propio comportamiento de los consumidores.
Las emisiones más importantes se derivan del sector de la energía. El 19% del consumo energético del mundo se debe al alumbrado. Sin embargo 2/3 de la iluminación instalada en la UE utiliza tecnologías anticuadas o ineficientes. Solo el sector del transporte emite alrededor del 23% del total de los gases de efecto invernadero, de los cuales el 70% proviene del tráfico rodado…Pero si el 10% de las personas de la UE utilizara el Teletrabajo se ahorrarían 22 millones de toneladas de CO2, las mismas que si el 20% de las personas utilizaran la Videoconferencia!!
Así, el desarrollo sostenible y la responsabilidad medioambiental se han convertido en una parte integrante de la estrategia corporativa de las empresas. Buen ejemplo es Telefónica. En 2007 creó una Dirección Corporativa para el Medio Ambiente y ha cuantificado su “huella de carbono” que representa 1,7 millones de Tm de CO2 equivalente a 7 Kg por acceso telefónico.
Los objetivos que se ha marcado la Unión Europea para el 2020 conocidos como 20:20:20 corresponden en esos porcentajes con el ahorro energético, con el uso de energías renovables y con la reducción de los gases de efecto invernadero. Si queremos cumplir con ese triple objetivo, necesitamos una economía de fuerte crecimiento y bajas emisiones de carbono. Para ello la adopción de soluciones innovadoras y de bajo consumo en el ámbito de las ETIC será determinante para la reducción de de las emisiones en todos los sectores económicos no solo en la UE, si no a nivel planetario.