Las etiquetas y probadores digitales, unidos a la experiencia de compra en Realidad Virtual, son las nuevas tendencias que se han marcado en el mundo del retail durante la Feria Retail Digital Signage Expo de Londres. El comercio convencional se está adaptado al ritmo de vida que se ha  impuesto nuestros hábitos gracias a las herramientas digitales. Y por este motivo, las tiendas están trabajando en cambiar su visión de negocio y ofrecer a sus clientes experiencias de compra que generen, además, una mayor rentabilidad en sus puntos de venta.

Con los probadores virtuales ya es posible ver cómo sienta la ropa sin necesidad de probársela y además son capaces de encontrar la prenda que mejor se adecue a nuestras necesidades y gustos. La mayoría de estos sistemas funcionan de forma táctil, nos facilitan la tarea de cambiar de talla o color e incluso de combinar las prendas con otras y que un dependiente del establecimiento nos ofrezca lo que necesitamos, todo esto sin salir de ellos. Además gracias a la conectividad  4G podemos recibir toda esta información para poder verla posteriormente en nuestros smartphones.

Telefónica On The Spot Services, especializada en productos y servicios que ayudan a digitalizar espacios físicos, apuesta por el Customer Journey, una asesoría donde se incluyen todas estas herramientas y que además analiza desde la necesidad de compra del cliente hasta el proceso de adquisición de los producto.  Así mismo, durante este proceso, también se examina qué música hay en los comercios, qué posibilidad de interacción se les brindan a los usuarios o qué tipo de experiencia sensorial puede ser accesible para optimizar el proceso de compra.  Este tipo de instrumentos dotan a las marcas y los negocios de valores diferenciadores, que facilitan, en muchos casos, atraer, vender y fidelizar a clientes mediante la innovación y el conocimiento de sus canales.

El objetivo de esta nueva tendencia es que los clientes no sólo compren sino que tengan una experiencia de marca que estimule sus sentidos y les proporcione una práctica de compra inolvidable, a la vez que uno se fideliza con la marca y con el establecimiento de compra.