Cuando trata con dictadores, Europa aplica un doble rasero: se apresura a sancionar al bielorruso Lukashenko, mientras se muestra claramente más conciliadora con el uzbeko Karimov, como hizo antes con Ben Ali. Pero ¿realmente merece la pena?, se pregunta el politólogo Bruno De Cordier. (Article)
Fuente : http://www.presseurop.eu/es/content/article/474761...
Fuente : http://www.presseurop.eu/es/content/article/474761...

Tendencias Científicas
Hasta pronto
CIENCIA ON LINE