Nuevas exigencias de Inteligencia y Resiliencia en la Seguridad Corporativa


La pandemia de COVID-19 ha despertado y acelerado, en muchas organizaciones de sectores públicos y privados, la necesidad de establecer análisis de inteligencia de seguridad corporativa e inteligencia competitiva mediante la optimización de datos e información en la gestión del riesgo.

La COVID-19 igualmente, ha cambiado la forma en que la resiliencia se debe observar y adecuar en las organizaciones porque esta crisis ha generado nuevas amenazas y alarmas con exigencia de soluciones globales y tratamiento holístico.

Esto ha acelerado el cambio en nuestros paradigmas de seguridad y la exigencia de aprender a identificar e interpretar los signos del cambio ahora y venideros para poder ofrecer una respuesta adecuada y sólida.


11/11/2021

MANUEL SANCHEZ GÓMEZ-MERELO

Convergencia y globalización

  El estado alarma por la pandemia ha acelerado no solo la transformación digital de las organizaciones, sino el irreversible movimiento hacia la convergencia de las  seguridades y su necesario tratamiento global.

  Pero, ¿cómo se está produciendo realmente la convergencia de las seguridades en las organizaciones y cómo ha cambiado su tratamiento?

  ¿Cuáles son los beneficios e inconvenientes reales experimentados de la misma? ¿Qué métricas son útiles para medir su efectividad o impacto?

  Hace aproximadamente un año, la SEC (Security Executive Council), realizó una encuesta del Barómetro de Seguridad en la que preguntó a múltiples directivos de seguridad física y lógica sobre la interacción y la cooperación entre las áreas de la seguridad cibernética y corporativa. El sesenta por ciento de los encuestados dijo que la cooperación había aumentado, y el 69% declaró que la razón de esto eran los distintos “asuntos que surgieron de interés conjunto”, sobre todo, durante el confinamiento y cambios provocados en la organización probablemente por la COVID-19.

  No obstante, la convergencia de las seguridades puede ocurrir a lo largo de un continuo cambio de situaciones o de estrategia y política de seguridad corporativa, que pueden ir, desde la estructura en la que tradicionalmente actuamos cuando hablamos de converger (áreas y equipos combinado, encabezado por un líder), hasta el mantenimiento de dos organizaciones que colaboran rutinariamente o la situación de dos departamentos funcionalmente separados que colaboran según sea necesario.

  Cada uno de estos modelos puede constituir la convergencia en algún nivel y puede traer los resultados y beneficios esperados según tipo de organización o entidad y circunstancias a esperar de la colaboración.
 


 

En cualquier caso, proporcionar una información analizada y detección y respuesta rápidas a los problemas mejorando el intercambio de inteligencia puede y debe proporcionar una nueva visión del lado práctico de la convergencia de las seguridades mejorando la resiliencia al ampliar la visión y gestión del riesgo globalmente.

  Inteligencia y análisis

  El planteamiento de una seguridad global (integral e integrada) puede producir grandes cantidades de datos e información por lo que, la relación señal-ruido puede ser bastante desequilibrante.

  En este sentido, los equipos de inteligencia y análisis se han vuelto fundamentales durante la pandemia, y la exigencia de una información amplia y rigurosa es una de esas circunstancias y cambios que han venido para quedarse una vez que termine la crisis de la COVID-19.

  Este incremento operacional y de análisis, principalmente para la gestión del riesgo y las seguridades, va dirigido a la optimización de los recursos humanos, procesos y tecnologías para el valor futuro de minimización de las consecuencias derivadas de la materialización de nuevos riesgos y amenazas, mejorando y controlando igualmente las vulnerabilidades.

  Seguridad global, integral e integrada

  El aceleramiento que venimos viviendo hacia esa seguridad global (integral e integrada), tiene múltiples beneficios y, sobre todo, la consecuencia de conseguir una visión holística de la situación, tratamiento y gestión del riesgo y las vulnerabilidades en nuestras organizaciones, su funcionamiento y continuidad con los adecuados costes.

  Para ello, además de la implementación de los equipos –internos o externos– de inteligencia y análisis del riesgo, hemos de aprovecharnos de la actual innovación tecnológica y la transformación digital, mediante la integración de sistemas y servicios para impulsar la mitigación de riesgos en personas, activos patrimoniales y procesos operativos para la mejora continua.

  Así hemos de implementar servicios especializados y tecnologías interactivas con visión de futuro para el mejor funcionamiento de nuestras organizaciones mediante el análisis y evaluación e implementación de los adecuados sistemas y servicios de seguridad (prevención y protección.

  Hemos de concentrarnos en cómo agregar valor a nuestra actividad analizando cuáles son los servicios clave de la organización y apoyarlos mediante una seguridad global sostenible para mostrar el valor compartido y la evitación de costes por incidencias o materialización de riesgos y amenazas potenciales.

  Líderes de seguridad global

  Especialmente, durante la pandemia de la COVID-19, los líderes de seguridad corporativa nos han transmitido una actitud de gran colaboración para garantizar la continuidad en cada momento, tanto a través de actuaciones directas en aquellos sectores esenciales como el sanitario, los transportes, la alimentación, la seguridad pública, etc., como en la urgente y necesaria implementación del trabajo a distancia y el teletrabajo desde los hogares mediante nuevos planes estratégicos y operativos de seguridad física y lógica o ciberseguridad según necesidades y exigencia de cada organización.
 


 

  Todo ello, sin duda, ha provocado un nuevo cambio de paradigma en la seguridad y sus líderes que, en este proceso de transformación y convergencia, exige un nuevo nivel experto en mucho más que la convergencia de la seguridad física y lógica con el objetivo y participación en la investigación para construir un modelo mejorado para la seguridad global en las organizaciones, identificar los beneficios o inconvenientes que provienen de la convergencia, determinar cómo se pueden medir eficazmente sus beneficios y determinar la variedad de formas en que esta convergencia se puede establecer en las organizaciones o por qué no se produce.

  Nuevos directores ejecutivos de seguridad, que han de ayudar a implementar gestionar o coordinar proyectos u organizaciones de forma global mediante una seguridad integral e integrada dentro del marco de una seguridad humana y ciudadana con una integración operativa pública y privada.