El modelo español de seguridad privada está liderando una revolución que fusiona tecnología, inteligencia artificial y soluciones personalizadas para proteger personas y bienes, organizaciones, infraestructuras críticas y servicios esenciales.
Una seguridad privada que evoluciona muy rápidamente, impulsada por la tecnología y la inteligencia, el talento, la globalización de la seguridad ciudadana y la integración operativa entre la seguridad pública y privada.
Esto es debido a que un amplio sector de la industria y servicios de seguridad privada se encuentra en constante crecimiento e innovación basado en ese desarrollo tecnológico y aplicaciones de la Inteligencia Artificial (IA), el Internet de las Cosas (IoT), la ciberseguridad y los sistemas inteligentes de control y gestión integral de los riesgos y las seguridades.
Evolución que se fundamenta, principalmente, en soluciones personalizadas para cada sector y área de actividad y, muy especialmente, para aplicaciones en seguridad ciudadana y protección de infraestructuras críticas y servicios esenciales.
Industria y servicios de seguridad privada que son parte de la solución y presentan una gran oportunidad para la implementación de una nueva cultura de seguridad.
Captación, retención y gestión del talento
La seguridad es una actividad estratégica, el puesto, la función y la contribución del profesional de la seguridad debe necesariamente ser más amplio que el de un técnico. Las organizaciones deben pensar en la implantación y el desarrollo del talento para la seguridad como algo que va más allá de la experiencia básica o técnica.
Los retos a los que se enfrentan las organizaciones en la captación, retención y gestión del talento en la actualidad, están marcados por una notable escasez de profesionales y una auténtica guerra por el talento, y las organizaciones se enfrentan a múltiples barreras que dificultan su capacidad para atraer y fidelizar a perfiles cualificados.
La captación, selección, evaluación y retención de talentos han de respaldar los objetivos estratégicos de una organización, incluida la inteligencia y seguridad.
Para cada organización y sector de actividad ha de elaborarse una estrategia para encontrar y retener el talento en el ámbito de la seguridad y para ello, ha de tenerse en cuenta, al menos: