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La gran desgracia medioambiental ocurrida en Japón vuelve a poner en tela de juicio a los riesgos que son necesarios asumir a la hora de apostas por la energía nuclear. Indudablemente, estas energías tienen ventajas respecto a las energías alternativas. Ahora bien, si hablamos de riesgos las dudas se disparan.


Energías posibles. Riesgos Posibles
El desastre sucedido en Japón ha reabierto el debate sobre la idoneidad o no de apostar por la energía nuclear. En este sentido los políticos españoles se han colocado en sus respectivos lugares en la contienda dialéctica. Como es bien sabido el Partido Popular apuesta por esta opción energética, los partidos ecologistas se han colocado en el bando contrario, mientras que el Partido Socialista parece mantener un planteamiento más relativista y, en cierto modo, pragmático. De hecho, la Vicepresidenta Dña. Elena Salgado ha afirmado que no deberían ser tomadas decisiones basándose en lo que acaba de suceder en Japón.

Bien. La energía nuclear es una de las que permitirían obtener energía de un modo relativamente barato. Esto hace que sea una opción muy relevante para la sociedad española ya que permitiría que la economía fuese más competitiva. No obstante, como sucede siempre con cualquier tipo de opción tecnológica, se generan una serie de riesgos potenciales que deben ser asumidos.

Precisamente, en este último sentido, es por donde provienen las principales críticas a esta energía. Las energías renovables son caras, pero el nivel de riesgos que es necesario asumir es mínimo. Supongamos que en España ocurriese un gran temporal de viento que haga que las placas solares de una planta o que un molino de viento salga volando y destroce un gran número de casas. En este caso, el riesgo potencial a nivel genético es inexistente mientras que el caso de la energía nuclear es algo que siempre está presente.

Sinceramente, no tengo nada claro cual el la decisión adecuada y qué es lo que debe hacerse a nivel político. Pero, ciertamente, lo que es innegable es que cualquiera de las dos opciones tienen ventajas y desventajas, lo que implica que ninguna de ellas es totalmente correcta o incorrecta. La cuestión está en saber cuales son los riesgos que vamos a asumir tanto a nivel estatal y a nivel internacional (recuérdese que si hubiese un problema en una potencial planta cerca de la frontera con Portugal la radiación también afectaría a ese país).

La complejidad de la situación es grande y la asunción de riesgos es algo inherente a las sociedades actuales y a los procesos tecnológicos.

Jueves, 17 de Marzo 2011
Nota

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