Científicos de la Universitat de València han creado un nuevo sistema de compresión de datos que permitiría reducir hasta en un 30% la descarga de información desde los servidores a los clientes en aplicaciones de visualización geográfica, como Google Earth. Para ello, el sistema evita la transmisión de información repetida que se produce habitualmente en estas aplicaciones.
Investigadores de la Universidad de Pennsylvania en Estados Unidos han desarrollado un modelo automatizado de toma de decisiones que compara y sopesa múltiples variables con el fin de predecir la elección óptima. De momento, se ha enfocado al ámbito de la medicina personalizada, para transformar simples predicciones en recomendaciones viables, aunque podría extrapolarse a cualquier escenario.
Investigadores de la Universidad de Londres han creado un algoritmo capaz de diseñar videojuegos de forma automatizada. Este sistema de Inteligencia Artificial, llamado ANGELINA, ha competido ya con diseñadores reales en un evento internacional, con resultados positivos.
¿Gótico o surfero? El ordenador será pronto capaz de diferenciar las subculturas más populares mediante un algoritmo que utiliza fotografías de grupo, para captar señales sociales como la ropa o los peinados. De momento, el promedio de precisión es del 48%, aunque los investigadores de la UC San Diego, en Estados Unidos, aspiran a conseguir un algoritmo tan exacto como la visión humana.
Científicos informáticos de Harvard (EEUU) han demostrado que algoritmos de inteligencia artificial podrían implementarse utilizando reacciones químicas. En un futuro, esto podría permitir, por ejemplo, crear "medicamentos inteligentes" que detectasen y diagnosticasen enfermedades; auténticas máquinas de inteligencia artificial de escala microscópica.
La interacción hombre-máquina es imprescindible para categorizar grandes volúmenes de información. Lo habitual es que sean los expertos quienes coloquen las primeras etiquetas. Sin embargo, un equipo de investigadores de la Universidad de Wisconsin, en Estados Unidos, sugiere invertir el modelo, de forma que sea la máquina la que etiquete directamente, a no ser que haya alguna confusión.
El sector de las TIC se enfrenta a dos retos clave para crecer de forma sostenible. Debe aumentar la eficiencia energética, sin dejar de ofrecer un rendimiento cada vez mayor. Ambos retos parten del mismo eje: reducir el consumo de energía desde los propios sistemas informáticos, aspecto que abordará el proyecto Excess de la UE desde la Universidad de Chalmers en Suecia.
Un programa informático bautizado como NEIL funciona las 24 horas al día en la Universidad Carnegie Mellon, en Estados Unidos, buscando imágenes en Internet. El sistema se esfuerza en entenderlas por sí mismo, identificándolas o haciendo asociaciones. Así, a medida que construye una creciente base de datos visual, adquiere lo más parecido al sentido común humano.
Investigadores de la Universidad de Purdue aseguran que el futuro de la seguridad en Internet pasa por la biometría, que permite la identificación humana a través de rasgos físicos o conductuales. Así, en lugar de recordar decenas de contraseñas, escáneres de retina, huellas digitales e incluso técnicas de reconocimiento de voz realizarán la misma función, mejorando la seguridad y facilitando la tarea. Por Patricia Pérez.