Tendencias 21
   




Humanos y delfines utilizan los códigos más simples y eficientes

El lenguaje humano y el movimiento de los delfines coinciden en la brevedad


Dos investigadores de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) y de la Universidad de Aberdeen (Reino Unido) han comprobado por primera vez que la ley de brevedad del lenguaje humano, según la cual las palabras más frecuentes tienden a ser más cortas, se cumple también en otras especies animales. Los científicos han confirmado que los delfines en la superficie del agua ejecutan con mayor frecuencia los movimientos más simples. (SINC)


SINC
30/07/2009

“Los patrones de comportamiento en la superficie de los delfines obedecen a la misma ley de brevedad del lenguaje humano, y los dos buscan los códigos más simples y eficientes”, explica a SINC Ramón Ferrer i Cancho, coautor del estudio que aparece en la revista Complexity e investigador del Departamento de Lenguajes y Sistemas Informáticos de la UPC. La ley de brevedad, propuesta entre otros por el filólogo estadounidense George K. Zipf, afirma que las palabras más frecuentes son las más cortas.

Ferrer i Cancho, junto al científico David Lusseau de la universidad escocesa de Aberdeen (aunque ambos realizaron el estudio trabajando en la Universidad de Barcelona y Dalhousie de Canadá respectivamente) han demostrado que cuando los delfines actúan en la superficie del agua tienden a ejecutar los códigos más sencillos, al igual que el ser humano usa más las palabras de menos letras cuando habla o escribe, la llamada “economía lingüística”.

La investigación incluye como ejemplo la novela El retrato de Dorian Gray, de Óscar Wilde. La palabra más citada es el artículo de tres letras “the” (se ha analizado la versión inglesa), y otros términos más largos, como “responsabilidades”, apenas se mencionan.

En el caso de los delfines los investigadores han establecido los distintos patrones de comportamiento en superficie de un grupo de la especie “nariz de botella” de Nueva Zelanda. Cada patrón se genera por la suma de hasta cuatro unidades básicas. Así, el patrón “coletazo al agua” (tail slap) está constituido por las unidades “golpe”, “cola” y “dos”; el patrón “salir a inspeccionar” (spy-hop) lo integran las unidades “parado”, “exponer” y “cabeza”; el “caída de lado” (side flop) las unidades “salto” y “lado”; y la “zambullida sin sacar la cola” (tail-stock dive) sólo la unidad “arco dorsal”.

En total, los científicos han cuantificado más de 30 patrones de comportamiento con sus correspondientes unidades, y han comprobado que los delfines ejecutan más los patrones constituidos por una unidad, y que aquellos constituidos por cuatro unidades son los menos frecuentes.

“Los resultados demuestran que las estrategias de codificación simples y eficientes del comportamiento de los delfines son similares a las que empleamos cuando utilizamos las palabras, y son las mismas que se aplican, por ejemplo, a la hora de comprimir una imagen fotográfica o de vídeo y ahorrar espacio”, explica Ferrer.

El investigador señala que trabajos como éste revelan que el lenguaje humano se sirve de los mismos principios que rigen los sistemas biológicos, “lo que nos hace pensar en la necesidad de romper las clásicas barreras entre disciplinas”.



Artículo leído 6257 veces




Comente este artículo

1.Publicado por JUAN DIAZ el 08/08/2009 03:07
Hay sílabas para distintas acciones, porque "mama", primera palabra propiamente dicha, es el gesto de afirmacion arriba-abajo, y "papá" seria negación izquierda derecha, si somos transdisciplinares, el psicoanalisis
puede ayudar: el cuerpo ES el lenguaje, pero ¿es el lenguaje una segunda corporalidad?. BUENO, si no les parece no lo publiquen. pero parece que ambos gestos combinados, en relación al cuerpo primario de apego, se leerian "yo". Etc.

Nuevo comentario:
Twitter

Los comentarios tienen la finalidad de difundir las opiniones que le merecen a nuestros lectores los contenidos que publicamos. Sin embargo, no está permitido verter comentarios contrarios a las leyes españolas o internacionales, así como tampoco insultos y descalificaciones de otras opiniones. Tendencias21 se reserva el derecho a eliminar los comentarios que considere no se ajustan al tema de cada artículo o que no respeten las normas de uso. Los comentarios a los artículos publicados son responsabilidad exclusiva de sus autores. Tendencias21 no asume ninguna responsabilidad sobre ellos. Los comentarios no se publican inmediatamente, sino que son editados por nuestra Redacción. Tendencias21 podrá hacer uso de los comentarios vertidos por sus lectores para ampliar debates en otros foros de discusión y otras publicaciones.