|
|
|
|
Los empíricos quisieron arrancar nuevamente el Arte médico de las especulaciones filosóficas y trataron de conciliar el dogmatismo con el empirismo, y fijar los principios del arte de curar. Entonces apareció Galeno, de quien dice un sabio escritor que cuando lanzó al mundo médico su aforismo “Contraria contrariis curantur” hizo más daño que la invención de la pólvora y la artillería. Claudio Galeno, queriendo amplificar y perfeccionar el dogmatismo hipocrático, lo desnaturalizó en tal grado que apartó durante siglos a la Medicina del camino de la verdadera ciencia, pues con su talento, con sus escritos tan numerosos, en los que siempre hablaba con elogio de su persona o de su sistema, y su estilo elegante y arrebatador, impuso sus opiniones, que se juzgaron incontrovertibles durante muchos siglos.
La crítica moderna juzga duramente su actuación. Veamos lo que dice el Doctor Gaillard, de Bruselas, refiriéndose a Galeno: “A pesar de su vasto saber, su inmensa erudición, su sagacidad, su elocuencia persuasiva y su habilidad práctica; a pesar de sus 300 tratados sobre medicina y los 25 diferentes sobre historia, gramática, filosofía, etc…, Galeno puede ser considerado por la crítica moderna como una calamidad para la medicina. Por espacio de doce siglos han dominado sus funestas doctrinas y han extraviado el movimiento científico bajo el falaz pretexto de reconstruir el edificio hipocrático; pero mucho más por la ambición de ser él sólo el dominador de las creencias médicas. Galeno, en lugar de servir el método experimental y razonado tan simple y verdadero del médico de Cos, se abandonó a los ardores de su imaginación y al deseo de explicarlo todo. Ahogando todos los hechos de observación en las concepciones teóricas más atrevidas, creó un dogmatismo propio, el más absoluto, extravagante, complicado e inaccesible, que es posible inventar; una mezcolanza de humorismo, solidismo, metodismo, vitalismo, animismo y naturismo tomado de la física y principalmente de la metafísica peripatética. Su sistema médico, que no puede ser analizado y que está plagado de contradicciones, es una especie de delirio eléctrico; su terapéutica está basada en la necesidad de evacuar la causa primera del mal y en esta otra indicación: atacar la enfermedad por alguna cosa que le sea contraria (Contraria contrariis). Su materia médica es una serie de hipótesis inauditas, de ideas arbitrarias, de sutilezas frívolas, de extravagantes confusiones. Su farmacología está de tal manera sobrecargada de fórmulas extrañas, que mereció el nombre de “Padre de la Polifarmacia”. Sus conocimientos en toxicología eran enteramente elementales”. Si se hubiera seguido el impulso que Hipócrates y sus discípulos dieron en su época a la Medicina, serían incalculables los beneficios que hubiera logrado la humanidad y el progreso que el arte de curar hubiera alcanzado como ciencia. Pero, como hemos dicho antes, Galeno comenzó por hacer tabla rasa de los principios de la Medicina que habían regido hasta entonces; abandonó el camino de la observación y el raciocinio abierto por Hipócrates para lanzarse al de la imaginación, que sólo sirvió para hacer más densas las tinieblas. Creador del Cuaternion y demás fantasmagoría médica que aún subsiste, aunque bajo otras apariencias, llevó el extravío de su imaginación hasta el extremo de dejar escrito – como un aviso práctico – que había soñado una noche que un enfermo grave al que asistía se había curado sangrándole, y que, movido por esto, le sangró y curó. Sería muy interesante un pequeño parangón entre las figuras de Hipócrates y Galeno. El primero, con la majestad del maestro que se preocupa lealmente de enseñar, jamás habló de su hábil diagnóstico, de sus notables curas ni de los disparates cometidos por sus colegas. El segundo, ególatra, relatando casos con el único fin de ponderar excesivamente su propia reputación. Pero este análisis nos llevaría demasiado lejos y excedería los límites impuestos a este capítulo. Pasemos por alto las mil y una teorías e hipótesis que en el transcurso de los siglos se han dado en la Medicina; todas nacieron con ímpetu arrollador, ensalzando lo que desdeñaba la anterior, para morir luego a manos de otra teoría no menos falsa ni arrolladora. La historia de este periodo sería la de los absurdos y desvaríos de la Medicina, y es que las enseñanzas de Galeno, ya de por sí absurdas, se remozaban en cada época con las aportaciones de una pléyade de inquietos y desafortunados reformadores, con la adición de prácticas repugnantes, enriqueciendo la terapéutica de la época con medicamentos absurdos como la orina de impúber, la leche de virgen, la sangre de recién nacido, aceite de ratas y de lagarto, excrementos de perro y productos procedentes del pavo real, del león, pulmón de zorra, etc… En su comienzo, el siglo XVI constituyó una época muy semejante a la nuestra desde el punto de vista médico. La enseñanza oficial de las célebres facultades de Montpellier en Francia, y otras en Alemania e Italia, no aceptaban ya ciegamente el arte médico de siglos pasados, que desde los romanos, y a pesar de los descubrimientos de los árabes, se resumían, en teoría, a un comentario interminable de Galeno, a parafrasear inútilmente a Dioscórides, y en la práctica, a las extravagancias de una polifarmacia sin base racional alguna, cuyos repugnantes medicamentos hemos indicado, y cuya única finalidad era dirigirse a “las causas ocultas” de todas las enfermedades, a las causas secretas de todas las cosas.
Martes, 24 de Julio 2012
|
Editado por
Carlos Rubio Sáez
Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Complutense de Madrid, el Dr. Carlos Rubio Sáez es además Especialista en Sociología por la Universidad Complutense de Madrid. Diplomado en ElectroAuriculomedicina, Sofrología, Homeopatía y Acupuntura, ha sido Fundador de la Asociación Española de Médicos Homeópatas, así como cofundador de la Asociación Española de Médicos Naturistas y de la Sociedad Española de Acupuntura.
Últimos apuntes
Venenos y Antídotos naturales
31/01/2017
SALUD INTESTINAL ll
25/11/2015
SALUD INTESTINAL l
10/11/2015
Claves del estrés oxidativo
23/03/2015
LA FARMACIA A PRINCIPIOS DEL SIGLO XX
06/02/2014
ALIMENTACION SANA
06/02/2014
COMENTARIOS SOBRE OBESIDAD
16/05/2013
SUPLEMENTOS NUTRICIONALES
16/05/2013
LA ALIMENTACIÓN DEL SIGLO XXI
19/03/2013
Archivo
Tendencias científicas
Enlaces
|
|
Blog de Tendencias21 sobre la salud y el bienestar natural
|
|