CRISTIANISMO E HISTORIA: A. Piñero

Hoy escribe Antonio Piñero

Antes de explicar el contenido de esta epístola hemos aludido a este problema, y luego hemos ido señalando en el análisis del contenido los cambios de pensamiento que presenta Flp tal como ha llegado hasta nosotros. Ante la variedad de temas, saltos bruscos de contenido, cambios en el estilo, etc., los estudiosos adoptan por lo general dos posiciones:

Unos admiten estos hechos, pero consideran que se debe otorgar confianza a la tradición que nos ha transmitido la carta paulina tal como está. Opinan que no hay razón contundente alguna para ver en ella más de una carta, pues esto implicaría la posible labor de un redactor que se habría tomado la molestia de reunir y ensamblar restos de antiguas cartas paulinas. Creen igualmente que los cambios de pensamiento, de tema y de estilo son frecuentes en otras cartas de Pablo (por ejemplo, Rom 16,17ss; 1 Tes 2,15s; 1 Cor 15,58).

Tales cambios en Filipenses se explican suficientemente –dicen— si se considera que la composición física de esta carta se prolongó durante un cierto tiempo y que en el entretanto le iban llegando noticias a Pablo, o bien éste se iba acordando de temas según se le ofrecían a su memoria.

Argumentan también los partidarios de la unidad de Flp que puede observarse cómo los temas en sí de la carta no están tan distantes unos de otros, cómo se repiten en todas las posibles partes de ella ciertas ideas comunes (la alegría; los adversarios…) junto con los mismos vocablos, y cómo un análisis fino puede llevar a encontrar una cierta lógica en los cambios de pensamiento del autor.

Otros estudiosos sostienen, por el contrario, que gran parte de las dificultades lógicas de Flp tal como está ahora se explican u obvian si se admite que la carta actual es un compuesto de dos o más cartas antiguas de Pablo.

Entre los defensores de esta hipótesis me parece que tienen más visos de verosimilitud aquellos que defienden en Flp la existencia de una amalgama de tres cartas:

1. La primera cronológicamente sería la nota o billete de Pablo en agradecimiento por la ayuda económica recibida de parte de los filipenses: 4,10-20. La carta sería del modo siguiente:


« 10 Me alegré mucho en el Señor de que ya al fin hayan florecido vuestros buenos sentimientos para conmigo. Ya los teníais, sólo que os faltaba ocasión de manifestarlos. 11 No lo digo movido por la necesidad, pues he aprendido a contentarme con lo que tengo. 12 Sé andar escaso y sobrado. Estoy avezado a todo y en todo: a la saciedad y al hambre; a la abundancia y a la privación. 13 Todo lo puedo en Aquel que me conforta.

14 En todo caso, hicisteis bien en compartir mi tribulación. 15 Y sabéis también vosotros, filipenses, que en el comienzo de la evangelización, cuando salí de Macedonia, ninguna Iglesia me abrió cuentas de «haber y debe», sino vosotros solos. 16 Pues incluso cuando estaba yo en Tesalónica enviasteis por dos veces con que atender a mi necesidad. 17 No es que yo busque el don; sino que busco que aumenten los intereses en vuestra cuenta. 18 Tengo cuanto necesito, y me sobra; nado en la abundancia después de haber recibido de Epafrodito lo que me habéis enviado, suave aroma, sacrificio que Dios acepta con agrado. 19 Y mi Dios proveerá a todas vuestras necesidades con magnificencia, conforme a su riqueza, en Cristo Jesús. 20 Y a Dios, nuestro Padre, la gloria por los siglos de los siglos. Amén. »


Ésta sería la primera por tres razones:

• Porque si al redactarse 1,4-5 (“4 rogando siempre y en todas mis oraciones con alegría por todos vosotros 5 a causa de la colaboración que habéis prestado al Evangelio, desde el primer día hasta hoy;”) hubiera sido ya prestada esta ayuda, Pablo no habría dejado de mencionarla.

• Porque por el tenor del texto en su conjunto se supone que Pablo está al principio de su prisión.

• Porque no tiene sentido que se le hubiera ocurrido a Pablo redactar una nota de agradecimiento por el don recibido pasado mucho tiempo, después de que todo el asunto de la enfermedad de Epafrodito hubiera ocurrido (es decir, en la hipótesis contraria, la nota estaría en su posición correcta donde la encontramos, en 4,10, después de lo descrito en 2,25-26:

“25 Entretanto, he juzgado necesario devolveros a Epafrodito, mi hermano, colaborador y compañero de armas, enviado por vosotros con el encargo de servirme en mi necesidad,26 porque os está añorando a todos vosotros y anda angustiado porque sabe que ha llegado a vosotros la noticia de su enfermedad”).

Esta nota o primera carta fue compuesta probablemente por Pablo poco después de recibir el donativo, es decir, antes de los acontecimientos que se describen en 2,25-26: la enfermedad de Epafrodito; el conocimiento de ella por parte de los filipenses y la manifestación de su preocupación por el caso; la promesa de enviar de nuevo a Epafrodito a Filipos.

Si es así, se obtiene un orden más lógico de los acontecimientos:

• Pablo tras su salida de Filipos se encuentra en mala situación.

• Los filipenses le envían ayuda económica por medio de Epafrodito (4,18).

• Nota de agradecimiento por parte de Pablo o carta primera (4,10-20).

• Enfermedad grave de Epafrodito (2,27).

• Epafrodito se cura y Pablo escribe una segunda carta llena de alegría (1,1-3,1a + 4,4-9 + 4,21-23), que veremos en la nota siguiente.

En esta segunda carta se alude a la enfermedad de Epafrodito (2,25) y a la preocupación por él de los filipenses. Por parte de Pablo se manifiesta el propósito de devolver a Epafrodito, ya sano, a Filipos.

• Envío de una tercera carta cuando tiene noticias de la presencia en Filipos de ciertos adversarios (3,1b-4,3).


Seguiremos. Saludos cordiales de Antonio Piñero.

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Hoy en el “Blog de Antonio Piñero” se trata del siguiente tema:

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Saludos de nuevo.


Miércoles, 6 de Mayo 2009

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Antonio Piñero
Antonio Piñero
Licenciado en Filosofía Pura, Filología Clásica y Filología Bíblica Trilingüe, Doctor en Filología Clásica, Catedrático de Filología Griega, especialidad Lengua y Literatura del cristianismo primitivo, Antonio Piñero es asimismo autor de unos veinticinco libros y ensayos, entre ellos: “Orígenes del cristianismo”, “El Nuevo Testamento. Introducción al estudio de los primeros escritos cristianos”, “Biblia y Helenismos”, “Guía para entender el Nuevo Testamento”, “Cristianismos derrotados”, “Jesús y las mujeres”. Es también editor de textos antiguos: Apócrifos del Antiguo Testamento, Biblioteca copto gnóstica de Nag Hammadi y Apócrifos del Nuevo Testamento.





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